Parte del desarrollo y crecimiento sano de los seres humanos es el APEGO EMOCIONAL.
El apego emocional, se da desde que está en el vientre materno. El bebé recibe todo lo que la madre siente. Al nacer su primer apego es el contacto ya con sus padres, luego hermanos, familia en general y conforme va creciendo, sus amigos del colegio y/o vecinos.
Si el niño desde pequeño sufre de traumas, intimidación, abuso sexual, la muerte de un ser querido, el divorcio de los padres, tener padre/madre que abusan de sustancias, etc., y no recibe, el cobijo que necesita en momentos de adversidad, en sus necesidades básicas de crecimiento, buscará el apego emocional en otro lado y por lo general no son adultos.
Lo encontrará con sus amigos de la escuela y/o vecinos, lo cual lo importante es de que ninguno tiene la capacidad y/o el desarrollo emocional para dar el cobijo que el niño necesita.
El cerebro de los niños, se empieza a desarrollar desde que está en el vientre de la madre y se termina el desarrollo como a los 22 años. Si el niño, vive constantemente situaciones de riesgo, su cerebro, sus conexiones neuronales no tendrán el desarrollo como el de un niño que vive en paz y armonía.
El cerebro al no tener el desarrollo correspondiente, los químicos que el cuerpo normalmente produce, tendrá bajas de dopamina, de oxitocina, de serotonina... Por lo que puede estar susceptible a estas sustancias.
Al ser adolescentes, lo que mas buscan es el PERTENECER al grupo de amigos, y aquí es cuando viene el peligro, porque harán cualquier cosa para ser aceptados, ya que en casa ya no hay ese apego emocional.
En la adolescencia vienen los comportamientos de rebeldía, de riesgo a probar esas sustancias, legales o ilegales, que están prohibidas para ellos. Y en el momento de la primera probada, el cerebro recibirá esa baja de dopamina, de oxitocina, de serotonina, que tiene la marihuana, la cocaína, la eroína. Y ahí es cuando comenzará su comportamiento adictivo, su automedicación a esa falta de químico en el cerebro, el cual le dará ese apego emocional faltante, ese escape al dolor.
Es por eso que no todos los que consumen drogas, se hacen adictos, porque la producción de esos químicos en el cerebro es normal.
Aquí es cuando debemos de entender la adicción al consumo de drogas, es una automedicación al dolor emocional, necesitan toda la compasión para que ellos encuentren el camino de la recuperación, necesitan recibir ese amor, ese cariño, esos abrazos, que en un momento de su vida les faltó.
