Cuántas frases hay, con respecto a la familia:
El núcleo de la Sociedad,
La familia lo es todo,
Un hogar es donde está tu familia,
La familia es una de las obras maestras de la naturaleza,...
Por lo que sí es tan importante, lo es para la recuperación de un adicto/alcohólico.
Alcanzar la sobriedad, no está en la clínica, ni en los terapeutas, está en la familia.
Está, en el trabajo que todos hagan, para empezar: leer, aprender, entender, lo que realmente es la adicción, lo que llevó a su familiar en buscar un paliativo a su dolor emocional.
Algo que también es importante, es reconocer, la disfunción familiar y trabajar cada uno los defectos de carácter, la codependencia, y todos los comportamientos obsesivos compulsivos que pueda haber.
Mientras estemos en la negación, que el problema es solo de quien consume sustancias, no habrá recuperación alguna, ya que seguirá el ambiente tóxico, entre los familiares y/o los amigos.
Las clínicas, y los grupos de autoayuda, tienen programas para toda la familia.
Como dice mi querido amigo Isaac Alvo, Tener un adicto en casa no es vergüenza, vergüenza es no hacer nada.
Salir de la zona de confort en ocasiones es doloroso, pero una vez que comienzas un camino de sanación, ya no quieres regresar como estabas antes.
Confía en Dios, y confiarás en tu capacidad y fortaleza para salir adelante.
